DR CARLOS BASANTA.*
TENEMOS UN PAÍS ENFERMO, QUE SE CURA
CON UNA DOSIS DE VOTO SALUDABLE
Doctor Basanta como está, usted sabe que yo trabajo en una empresa básica y jamás habíamos estado como ahora, esto se volvió un caos; hemos dejado perder al país, no veo futuro ni en lo social ni en lo económico, ahora ni hacer campaña política se puede, supo lo de los 3 personas dirigentes de oposición muertas en Barinas que iban en una caravana que fue bloqueada por los del oficialismo?. Si y estoy consternado amigo, pero lo peor que podemos hacer es caer en desesperanza, Venezuela sigue siendo Venezuela, aunque han cambiado muchas cosas y no está como queremos aun seguimos en ella; tenemos un país enfermo, no ha muerto, toda enfermedad es curable, sobre todo si esa enfermedad es social en su génesis. Como médico, graduado tras muchos sacrificios en una Universidad Venezolana, de lo cual me siento orgulloso, aprendí que en medicina las soluciones se obtienen actuando sobre las causas y no sobre las consecuencias, los signos y síntomas, aunque debemos tratarlos; es nuestro deber analizarlos en su esencia para descubrir su origen, hacer un diagnóstico y poner un tratamiento. Venezuela es un país enfermo, cuya medicina está en la conciencia de cada uno de los venezolanos, tenemos el diagnostico e identificado el agente causal, solo necesitamos una buena dosis de votos saludables el 7 de octubre.
Que nos pasó doctor?, hacia que barranco vamos?, usted habla de una enfermedad, me lo podría explicar por favor. Hermano somos un país con una grave enfermedad Social, con una inversión de valores que conlleva a una descomposición en la célula fundamental que es la familia; la Salud Social debe incluir tres aspectos fundamentales; lo Económico, lo Social propiamente dicho y lo Político como garante de la participación individual y colectiva. La Sanidad Social debe garantizar ingresos suficientes, empleos seguros, accesibilidad a los recursos desde el punto de vista económico, con la garantía de la unidad familiar, interrelación social y comunitaria solidaria y en armonía donde lo filial predomine sobre los dogmas independientemente de su origen y donde los individuos sin discriminación de credos, razas ni ideología tengan las mismas oportunidades de participación en las decisiones que afecten la vida social en su conjunto. La salud Social debe ser garantía de inclusión, económica, comunitaria y política, pero lamentablemente el discurso y la acción de los conductores del estado marcharon en sentido contrario y en vez de unirnos nos dividieron aun más.
Fomentar la división entre chavistas y escuálidos, entre pobres y ricos, entre blancos y negros, no encaja, con nuestra idiosincrasia, el grado de fanatismo de lado y lado ha disgregado la sociedad y la familia con repercusiones sicológicas a todo nivel y allí tenemos las consecuencias pueblo disparando contra sus mismos hermanos y eso no ha sido casualidad; la siembra del odio en Venezuela es premeditada, responde a lineamientos de tipo ideológico, es una estrategia del poder, para el poder, el inculcar el odio en las masas contra los que piensan distintos, la técnica de repetir, ellos los malos, los enemigos es viejo, y en nuestra era, los escuálidos, los contrarrevolucionarios, los pitiyanquis, los oposicionistas, y nosotros los patriotas, los buenos, los que los amamos, a ustedes que han sufrido tanto por culpa de ellos. Hemos perdido además la libertad por el miedo a morir o a ser víctima del hampa impune; porque la inseguridad en Venezuela es una realidad, sino pregúntenme a mí, al resto de mi familia, o a los miles de personas de ojos rojos y húmedos, que con trajes negros y tristeza de alma hacen guardia en las morgues de este país
La salud no puede aislarse de lo económico ni de lo social, porque son parte de la salud de los pueblos, son muchos los efectos psicológicos y orgánicos producto de los trastornos en la economía y las patologías sociales, transformándose en un circulo viciosos, el no saber a ciencia cierta qué pasará con nuestras empresas al no conocerse ningún plan al respecto genera incertidumbre; porque la realidad del manejo de nuestras principales industrias incluyendo a PDVSA ha sido la falta de inversión y de mantenimiento, con consecuencias trágicas como en Amuay, aunado a las expropiaciones y quiebras de las empresas de servicios y otras de capital privado nacional y extranjero, generando en cierre con aumento del desempleo y sub empleo, disfrazado con limosnas misioneras, pero los venezolanos tenemos la capacidad intelectual y los recursos para resurgir económicamente, aunque el daño social ha sido inmenso, pero somos resilientes y sabemos aprovechar las oportunidades y el 7 de Octubre, en pocos días tenemos la oportunidad de inyectar con votos saludables la sangre de la patria y dar al traste con la enfermedad por la que está convaleciendo.
PILDORAS DE TU MEDICO
· Es deber de cada uno de los miembros de este país, preservar un presente que nos permita sentar las bases de un futuro a construir por esa generación de relevo que son nuestros hijos, quienes nos dieron el titulo de padres; pero para que eso pueda ocurrir, necesitamos unas condiciones de libertad, de seguridad, de garantía de vida, y no solo vivir, sino vivir con calidad
· Después del 7 de octubre, una vez que la medicina del voto saludable haga su efecto, debemos eliminar de nuestro diccionario las palabras guerra, batalla, aplastar, combate y todas las que inciten a la violencia, y permite que el pensamiento plural y multicolor adorne el escenario político.
· Entender que es necesario la existencia de la diversidad de pensamiento y el derecho a disentir sin que él no estar de acuerdo sea considerado un delito,
· Tienes una responsabilidad contigo mismo, con tus hijos con tu familia y con el país de acudir masivamente y bien temprano el 7 de octubre a sufragar para salvar a Venezuela, y la única forma es ejerciendo el voto saludable.
VACUNA CONTRA EL ESTRÉS
Un hombre llega a una tienda de ropa a comprar un regalo para su señora - señorita busco un regalo para mi señora. La vendedora una linda y joven chica le dice: - ¿le gustaría ver algo realmente bueno en ropa interior? -- Por supuesto que si, pero que tal si primero vemos el regalo de mi señora.
Entra una señora gorda en el metro y un chico le comenta a otro:
-¿Has visto que gorda?, parece un armario!
La señora que lo ha oído, le da una fuerte cachetada y le dice:
- Perdona hijo, es que se me abrió la puerta.
Hasta nuestro próximo contacto.
*Medico. Magíster en Salud Pública.
E. mail basantac@cantv.net
www.drcarlosbasanta.es.tl
Twitter: @drcarlosbasanta